Que es un alcoholímetro y diferentes tipos
Un alcoholímetro es un instrumento de uso personal, profesional o jurídico, cuya finalidad es medir los niveles de alcoholemia de una persona (el porcentaje de alcohol en su sangre) y de esta forma lograr determinar si el individuo está en disposición de realizar tareas que requieran alta concentración.
Su uso más común y por el cual es conocido es el de determinar si una persona se encuentra en condiciones de conducir.
Existen principalmente 2 tipos: los químicos (o desechables) y los eléctricos. Estos últimos son los más populares, a la vez que son más precisos, ya que tienen diferentes sistemas para detectar la presencia de alcohol en sangre o aire.
Dentro de este tipo, existen multitud de modelos de precios y calidades, que determinaran el grado de fiabilidad y seguridad en las mediciones. Podríamos «resumirlos» en 3 niveles:
- Con sistema de sensores semiconductores básicos, que tienen una precisión fiable hasta 0,25 mg/l; a partir de tasas superiores pierden fiabilidad. Son los más económicos y enfocados para uso personal.
- Con sensores electroquímicos, destinados también para un uso personal, pero son mas precisos, teniendo un buen desempeño entre 0,00 y 2,00 mg/l. También tienen un consumo menor y requiere de menos calibración respecto a los de semiconductores.
- Los que incorporan sensores infrarrojos son mucho más precisos y caros, y están indicados para el ámbito profesional y judicial. Cuentan con certificaciones de organismos competentes.
Cosas a tener en cuenta
A continuación podrás ver diferentes aspectos implementados de diferente manera, que has de tener en cuenta. Evidentemente, un dispositivo más caro debería cumplir estos aspectos de mejor manera, pero eres tú quien ha de priorizar que cosas son realmente importantes para ti, para elegir el alcoholímetro que se adapte a tus necesidades.
- Diseño/tamaño: lo recomendable es que sea compacto, pequeño y ergonómico para ser utilizado con una sola mano.
- Precisión: como has visto antes, dependiendo del tipo de sensor que incorpore, será más o menos preciso.
- Sensibilidad: va de la mano de la precisión. Cuanto más sensible es, más caro será, pero no necesitará recalibraciones, como otros modelos menos sensibles.
- Autonomía: como todo aparato electrónico, existe un consumo de energía. Normalmente se alimentan con pequeñas pilas AA o AAA, y tienen un numero de mediciones limitado.
- Tiempo de respuesta: capacidad de obtener los resultados en el menor tiempo posible, para poder realizar varias mediciones en el menor tiempo
- Tipo de válvula: por higiene y salubridad, el alcoholímetro debería montar una boquilla antirretorno con válvula de retención, para evitar que aire y saliva vuelvan hacia el usuario.
- Pantalla: es importante que incorpore una pantalla con información legible y clara. Hay modelos que carecen de ella, indicando el resultado con luces o sonidos.
- Resultados: cada país puede tener una legislación diferente. Asegúrate que el alcoholímetro elegido se adapten a las exigencias legales de tu zona.
Visto esto, un buen modelo sería del tipo sensor electroquímico, de alta sensibilidad, con valvula antirretorno, pantalla digital y que muestre la información clara y en un tiempo de respuesta breve. Evidentemente, ha de ser un modelo compatible con las tasas permitidas en tu país. Luego entrarían aspectos más de diseño, como que sea cómodo de sujetar y pequeño.
¿Cómo usar el alcoholímetro?
Cada modelo tiene su manual de instrucciones, el cual es recomendable leer detenidamente para saber utilizar y entender el funcionamiento del aparato. Sin embargo, la mayoría de alcoholímetros de uso personal suelen tener esta secuencia para hacer una medición:
- Insertar la boquilla del alcoholímetro.
- Pulsar el botón de encendido.
- Esperar a que el alcoholímetro esté preparado. Dependiendo del modelo, será con alguna luz, o mensaje en la pantalla.
- Sopla en la boquilla con fuerza y de forma constante durante 4 segundos. Probablemente escuches un pitido al iniciar el soplido, no debes detenerte hasta que el pitido acabe.
- Esperar que el alcoholímetro muestre el resultado. Ten en cuenta que el resultad de la prueba suele visualizarse durante unos segundos.
- Para realizar otra prueba, hay que esperar a que se apague el dispositivo y repetir este procedimiento.
La importancia de elegir un alcoholímetro fiable
A pesar de que mucha gente no caiga en esto, un alcoholímetro es un dispositivo que ha de tomarse muy serio. Y es que este aparato arroja una medición que conlleva una importancia legal, ya que este resultado puede ser utilizado en una situación judicial.
Y es que los alcoholímetros también se utilizan en ámbitos profesionales, por lo que estos han de ser fiables y arrojar resultados fuera de dudas.
Por lo tanto, a la hora de elegir un alcoholímetro, fíjate bien que sea un dispositivo de calidad para tener unos resultados fiables y en los que puedas confiar en los resultados emitidos.